Elecciones de 2018
Las elecciones federales de México de 2018 son parte de las elecciones
de ese año que tuvieron lugar en México. Son denominadas oficialmente por la
autoridad electoral como el Proceso Electoral Federal 2017–2018, se llevaron a
cabo el domingo 1 de julio de 2018.
Los contendientes a estos comicios que ocuparon en lugares destacados
primeros puestos en las encuestas fueron: José Antonio Meade, postulado por la
coalición Todos por México formada por el gobernante Partido Revolucionario Institucional
(PRI), junto con los partidos Nueva Alianza (PANAL) y Verde Ecologista de
México (PVEM). También se presentó Ricardo Anaya, de la coalición Por México al
Frente creada por los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Movimiento
Ciudadano (MC) y el PAN. Y el último contendiente fue Andrés Manuel López
Obrador, de la coalición Juntos Haremos historia formada por el Movimiento de
Regeneración Nacional (Morena), con los partidos del Trabajo (PT) y Encuentro
Social (PES). La candidata independiente, Margarita Zavala, hizo el anuncio durante la grabación del programa “Tercer Grado”, a transmitirse en Televisa.
“Retiro la candidatura de la contienda por un principio de congruencia, por un principio de honestidad política y también para dejar en libertad a los que generosamente me han apoyado y tomen su decisión como se debe tomar en esta difícil contienda”, afirmó, de acuerdo con un adelanto de la entrevista en “Tercer Grado”.
El 1 de julio además de elegir presidente los mexicanos votaron por
candidatos a gobernadores, un jefe de gobierno, alcaldes, concejales,
regidores, juntas municipales, sindicaturas, senadores y diputados locales y
federales. Según el Instituto Nacional Electoral (INE) los puestos públicos en
disputa fueron 18.311, la primera vez que se eligen tantos en un solo proceso.
Triunfo y asunción de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República
El Instituto Nacional
Electoral (INE) de México ha confirmado este domingo a última hora la victoria
del candidato izquierdista a la Presidencia del país, Andrés Manuel López
Obrador, que se ha hecho con al menos el 53% de los votos, según los datos del
recuento rápido realizado tras las presidenciales celebradas este domingo.
Es
la primera vez que un candidato de izquierdas gana las elecciones
presidenciales. López Obrador ha logrado la victoria con el 53,5% de los votos,
según los resultados provisionales con el 36,1% de las actas escrutadas. En
segundo lugar, el aspirante del conservador Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo
Anaya, obtuvo entre el 22,95% de los sufragios. En tercer lugar, quedaría el
candidato del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), José
Antonio Meade, que logró entre el 15,07%. En último lugar figura el aspirante
independiente Jaime Rodríguez Calderón, el Bronco, con entre el 5,73% de los
votos.
El triunfo de López Obrador es la constatación de que el país
exige a gritos un cambio. El hartazgo y el enojo con el sistema actual han
podido más que cualquier otro factor. México le brinda la oportunidad a quien
se lo había denegado en dos ocasiones. A los 64 años, el líder de Morena
promete una transformación a la altura de la Independencia, la Reforma y la
Revolución. A partir de ahora ya las grandilocuentes propuestas deberán ser
aterrizadas. López Obrador deberá concretar cómo acabará con la corrupción más
allá de la honestidad que promulga y tendrá que definir un plan para reducir
los niveles de violencia.
México y la clase media
Ha pasado un año y medio desde que AMLO ganó la presidencia. En este momento, la clase media de hoy se siente inquieta. No perdonaron a Peña Nieto por su corrupción y su violencia. Continuaron trabajando y luchando bajo el entendimiento de que con este nuevo gobierno, estarían mejor. Ahora esa clase media siente amenazada su estabilidad. El 57% de la población no tiene un "padrino" importante, ni está en la cima de la cadena alimentaria. Critican al PRI y al PAN y ahora comienzan a odiar a MORENA, que resultó ser peor que el llamado "PRIAN".
En los últimos días, esta clase media en México organizó una manifestación en la que le gritaban "ESCUCHAME" al presidente. La respuesta fue despreciar y minimizar su ira.
Hoy la clase media mexicana está preocupada. Todo parece indicar que, al igual que con Luis Echeverría y López Portillo, hay un ataque furioso. Generar riqueza en este gobierno es un pecado mortal.
Hoy, la clase media de México se aferra con todas sus fuerzas a sus logros, fruto de su trabajo en los años anteriores. Andrés Manuel López Obrador demostró ser ese peligro tan frecuentemente mencionado. López Obrador está en contra de la generación de riqueza. Eso lo convierte en un adversario inminente de aquellos que desean prosperar y crecer.
Como Omar Elí Robles menciona en su editorial, Slim, Salinas Pliego, Romo y el 7% de la clase A / B de México no se declararán en bancarrota en esta crisis. Los afectados por la tormenta que se avecina son los microempresarios, los profesionales independientes, las pequeñas empresas. Aquellas personas que pagan matrícula, compran sus automóviles con un crédito del banco. Su ropa con las tarjetas de crédito Sears o Liverpool o pagar con tarjeta de crédito su seguro de automóvil o seguro médico, y ahorrar algo de dinero para poder permitirse ciertos lujos, como viajar.
Acciones gubernamentales ante la pandemia del Covid-19.
En el país ya se llevan a cabo acciones para reducir
al máximo el contacto entre personas para que no se presenten, al mismo tiempo,
casos graves de la enfermedad que sobrepasen la capacidad de atención del
sistema hospitalario. El virus del Covid-19 es uno de los fenómenos más
complejos que ha enfrentado la humanidad en las últimas décadas. Es un virus lo
suficientemente contagioso para distribuirse con gran velocidad, con una
relativamente alta tasa de mortalidad, pero suficientemente baja para que la
gran mayoría de los infectados sobrevivan y sigan expandiendo la epidemia.
Nadie lo diseñó, por supuesto, pero es perfecto para generar caos en la
sociedad actual, globalizada, concentrada en ciudades, pero también con
problemas para atender la salud de la población, después de décadas en las que
se vendió la idea de que no era importante que el Estado invirtiera en
cobertura médica.
Lo que el gobierno hizo fue instrumentar las acciones más drásticas de aislamiento social, con implicaciones graves para la economía, cuando se inició el fenómeno de contagio comunitario, hacerlo antes hubiera implicado enormes costos, sin mayor efecto en la propagación de la epidemia. Un cierre anticipado hubiera hecho más complicado que las personas permanecieran en su casa justo cuando es más importante que se encuentren aisladas, en un país en el que el tamaño de la economía informal, y los empleos formales precarios, hacen muy difícil que las personas dejen de trabajar. Antes, el gobierno fomentó acciones de higiene, de prevención, de aislamiento de personas con mayor riesgo y de monitoreo de personas infectadas y de su entorno, que han contenido la expansión más rápida de la epidemia. Las pruebas han servido como un ejercicio de monitoreo y prevención en una fase de casos importados, pero, al igual que otros países, no como una estrategia de pruebas masivas, costosa e innecesaria.
Ya se implementan políticas muy bien dirigidas, como la atención por medio de teléfono y mensajes de texto a personas de la CDMX con síntomas de la enfermedad, a las que se les proporciona asesoría médica y un kit básico de alimentos e insumos como medicinas, termómetro y mascarillas. El potencial enfermo es monitoreado diariamente por teléfono y eventualmente, si lo amerita su condición, visitado por un médico o trasladado a un hospital. Mientras tanto, en la ciudad y en el país, ya se llevan a cabo acciones para reducir al máximo el contacto entre personas, para que no se presenten, al mismo tiempo, casos graves de la enfermedad que sobrepasen la capacidad de atención del sistema hospitalario. Vienen momentos difíciles, pero la dificultad de los mismos puede disminuir si extremamos medidas de higiene y de aislamiento social para evitar la tragedia que hoy viven otras naciones.
Medidas de contención
El 23 de marzo el gobierno federal ordenó que los
empleados trabajaran desde sus hogares durante la
emergencia sanitaria; también permitió que los
trabajadores con niños menores de 12 años
pudieran alternar sus días de trabajo. El 24 de marzo México entró en la fase 2 de la
pandemia y el gobierno estableció la “Jornada
Nacional de Sana Distancia” para promover
medidas básicas de higiene y distanciamiento
social, urgiendo a los ciudadanos a quedarse en
casa y recomendando la suspensión de actividades
no esenciales en los sectores público, privado y
social. El 28 de marzo, el Ejecutivo Federal hizo un
llamado nacional a permanecer en casa y solo salir
por actividades esenciales, asimismo, reafirmó la
suspensión de las actividades gubernamentales no
esenciales y pidió al sector privado a unirse a estos
esfuerzos. El 30 de marzo las autoridades sanitarias ordenaron
la suspensión de las actividades no esenciales en el
sector público, privado y social hasta el 30 de abril.
Las excepciones fueron los servicios públicos
sanitarios, la seguridad pública y actividades
fundamentales para mantener la economía en
funcionamiento, la operación de programas
sociales y la infraestructura para abastecer y
distribuir bienes y servicios de primera necesidad.
Las personas vulnerables y los mayores de 60 años
recibieron la orden de mantenerse estrictamente
en cuarentena. El 31 de marzo se firmó un acuerdo entre el
gobierno federal y gobiernos estatales para
coordinar las medidas establecidas ante la
emergencia sanitaria. El 20 de abril, México entró a la fase 3 de la
pandemia y extendió la suspensión de actividades
no esenciales hasta el 30 de mayo. En algunos estados se ha reactivado la economía parcialmente y la gente puede permanecer en la calle, sin embargo, en otros el semáforo indica que no es congruente ni seguro terminar la jornada de Sana Distancia por lo que los gobiernos estatales solicitan su estancia en casa.
Bibliografías
Clavellina Miller, J. L. (2020). Medidas de contención y de política económica ante la pandemia de COVID-19 en México.
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HUMANOS EN MÉXICO. Revista Direitos Sociais e Políticas Públicas (UNIFAFIBE), 8(1) 488- 514.
Rincón, F. D. J. C., & González, G. F. L. (2020). LA PANDEMIA DE COVID-19 Y LOS DERECHOS
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